Cómo cultivar tomates paso a paso.

Vivimos en una sociedad donde nuestro interés en cuidar nuestro cuerpo y salud está creciendo día a día y estamos consumiendo alimentos más saludables con menos grasa y generalmente menos procesados. pero… ¿Qué es saludable? Vamos a los supermercados y estamos bastante impresionados por los alimentos en los que aparecen las palabras luz, sin azúcar añadido y especialmente de la agricultura orgánica. ¿Confiamos? Con tantos rumores de que estamos constantemente escuchando sobre el origen de las verduras o frutas orgánicas, está claro que en algunos casos nos dan un grito hoy aprenderás paso a paso.

Paso 1: Comprar semillas certificadas.

Comprar semillas certificadas primero o incluso tomar algunos de sus tomates (para estos recomendamos no lavar las semillas, sino sólo para secar un poco con papel absorbente y plantarlo directamente.

Paso 2: Preparar una planta o maceta.

Prepare un lecho de semillas o use recipientes reciclables como cajas de huevos, pequeños frascos de plástico limpio o botellas cortadas a la mitad.
Sólo asegúrese de que están limpios y tienen agujeros para el drenaje.

Paso 3: Comprar sustrato de calidad.

Compre un sustrato de buena calidad, pida sus propiedades y evalúe sus opciones.

Paso 4: Coloque dos semillas en cada recipiente o maceta.

Poner al menos dos semillas en cada recipiente, no se puede plantar demasiado profundo (un centímetro de profundidad es más que suficiente).

Paso 5: Hidratar ligeramente el sustrato.

Humedezca ligeramente el sustrato (no ahogue la planta) y cubra el recipiente con papel de plástico para que la humedad no escape demasiado rápido.
A continuación, encontrará un lugar adecuado en su casa donde se puede comprobar con frecuencia (no es necesario en este punto para golpear una gran cantidad de luz). Asegúrese de que el sustrato se mantenga húmedo.

Paso 6: Alrededor de 8-10 días para ver los primeros brotes.

Después de unos 8 a 10 días puedes empezar a ver los rodajes. En este punto debe colocar las plantas en un lugar con mucha luz (cuidado con las corrientes frías) o utilizar bombillas cerca de ellas (aprox. 5-10 cm) manera)

Cuando nacen las dos semillas que encontraste al principio, califica cuál es más fuerte y corta la otra (¡algo cruel, pero necesaria!).

Paso 7: Asegurar un flujo de agua uniforme y moderado.

Deje que el agua fluya moderadamente (no la ahogue, pero no deje que el sustrato se seque). Una de las mejores maneras de regar las plantas de tomate es regar goteos.

La gota logra drenar suficiente agua a las raíces sin inundarlas. También podemos ahorrar mucha agua.

Paso 8: Después de 6-8 semanas .

Después de 6 u 8 semanas y cuando el frío se ha ido (o si vives en un clima tropical, solo espero que tus plantas sean de un buen tamaño), puedes colocar tus plantas en el lugar donde eventualmente crecerán.

Aún no tienes que trasplantarte, pero tienes que acostumbrarte a tu nuevo espacio. Se puede comenzar en las horas de sol de 2 a 3 horas por día.

Paso 9: El frío ha terminado.

¡El frío se ha ido! Tus plantas ya tienen un buen tamaño, después de ocho semanas puedes trasplantarlas a su ubicación final.

Paso 10: Limpiar el suelo.

Despejen el suelo de las césped. Si usted tiene una maquiana  una azada motora, es ideal arar bien la tierra para que esté suelta y drene correctamente.

Paso 11: Realizar el trasplante.

Añadir compost o buen sustrato al taladro. Asegúrese de humedecer (no regar) el agujero e introducir la planta que tiene. Cubra cuidadosamente hasta que sólo el tallo esté visible.

Paso 12: Finalmente mantillo de paja + mucha agua + sol.

Para terminar y ver cómo crecen nuestras plantas de tomate, hacer un mantillo de paja en el suelo. Esto evitará en gran medida el crecimiento de las destasas.

Paso 13: Agua de goteo diaria.

Idealmente 2 veces al día, unos 20-30 minutos si tienes un temporizador. De lo contrario, sólo unos 40 minutos.

El riego depende en gran medida de la temperatura ambiente y de cómo veas tus plantas de tomate. Si ha caído hojas, aumente el flujo diario de agua. Se recomienda encarecidamente no inundar el suelo durante el riego y no mojar las hojas. Asegúrese de que reciben mucha luz todos los días.
En general, las plantas de tomate son plantas ideales para crecer en un jardín urbano.

La razón es que si tienes un poco de espacio, luz solar durante varias horas del día y unas cuantas ollas, puedes llenar tu jardín en casa con tomates de todo tipo. No necesitas mucho más que eso.